por Fabián Flores S. Ningún acontecimiento extraordinario es necesario, pero tampoco imposible en su ocurrencia. A nosotros, los cientistas sociales, nos cabe poner entre paréntesis, al menos por un momento, los debates concernientes a la moralidad o legalidad de las acciones que constituyen el fenómeno, y centrarnos en vez en explicarlo, conjeturar sobre sus condiciones…