La paradoja de la elección brasileña. Una esperanza desconcertante, un triunfo con derrota, un neofascista neoliberal

por Juan Pablo Vásquez Bustamante y Juliane Rodrigues Teixeira

Las recientes elecciones generales desarrolladas en Brasil presentan resultados que parecen conducir a conclusiones que podrían ser un tanto contradictorias, o bien, desglosados, apuntan a direcciones diferentes. Se trata de una situación extremadamente compleja que permitió avanzar a los sectores progresistas y de izquierda en una tarea que, más que necesaria, se hacía urgente, y que, sin embargo, dejó ventanas y cortinas abiertas y una grieta en el techo, mientras las fuerzas solamente alcanzaron para dejar bien cerrada la puerta principal en el último momento y tras una lucha incesante. Continuar leyendo

“Las soluciones a lo actual va a venir del presente”: Entrevista a Alex Shams

por Afshin Irani

Si el gobierno quiere imponer la ley en base a una doctrina islámica, eso implica un debate social acerca de qué significa la doctrina y cómo definirla. Muchos pensamos desde fuera que la Sharía o la ley islámica es una cosa fija, pero la evidencia muestra que siempre hay un punto de debate, en el que hay muchas perspectivas. Esto crea una cierta unión en la sociedad, un reconocimiento entre partes que antes quizás eran mucho más divididas o no se veían tan conectadas. Ahora vemos el impacto de décadas de activismo adentro de Irán con respecto a esos temas. Continuar leyendo

Todos los nombres de Mahsa Amini, o sobre la crisis terminal del republicanismo islámico

por Afshin Irani

Aunque todo está dicho, nada está hecho. Es tarea de la sociedad iraní procesar este malestar para anteponerse a 49 años (y en perspectiva, a toda una historia moderna de la nación) de absolutismos camuflados. Sin embargo, el cambio en el sentido común de la sociedad, en el protagonismo de las mujeres cultivado en el seno de las luchas en contra de la contrarrevolución, es una fuente de esperanza inagotable. Es difícil, y raya en la ficción, pensar que estas protestas terminarán sin un cambio significativo en una sociedad vibrante y deseosa de una mejor vida. En esa travesía, el pueblo iraní merece toda nuestra solidaridad y apoyo. Zandeh Bad Mardome Iran. Continuar leyendo

La Casa de Windsor

por Tom Nairn (Traducción de Afshin Irani)

Confrontados por la apabullante popularidad de la monarquía, no es suficiente atorarse con indignación y desprecio, o consolarse a uno mismo con cuentos de uno o dos honestos haters de la Reina en un pub la noche de un domingo. Tales actitudes llevan, o al tipo de disgusto con la sinrazón popular—las masas que se dejan engañar por un espectáculo vacuo—, o a nociones románticas de un pueblo que realmente no se deja engañar por todo esto y permanece secretamente consensuado detrás de la fachada de la bandera británica. Ambas nociones son peligrosas para el socialismo. Es mucho más importante preguntarse cuáles son las razones históricas del carácter especial de la monarquía británica. Estas no pueden ser reducidas a consideraciones abstractas de ideología y clase. Es más, son estas mismas características las que nos deben ayudar a comprender las causas de la popularidad de esta institución. Continuar leyendo

Notas sobre el Affaire Rushdie y un escritor llamado Salman

por Afshin Irani

Volver hoy a la retórica del Affaire parece tema del pasado y por eso el régimen iraní se desmarcó con prudencia del reciente intento de asesinato. Por otro lado, sectores de la ex monarquía han aprovechado con oportunismo la situación para volver a aislar política y económicamente a los iraníes, mientras que los sectores conservadores del clérigo han celebrado el atentado también para aislarse de negociar con occidente. Asimismo la fatwa también ha sido repudiada por varios autores y artistas iraníes que, se puede decir con propiedad, entienden por lo que está pasando Rushdie. Lo que quiero decir es que la fatwa muestra también la división que existe en la sociedad iraní. Continuar leyendo

Ya no es posible esconder la muerte. Notas sobre cine, televisión y violencia a cinco meses de guerra en Ucrania.

por Luis Thielemann H.

El Batman de Reeves pone fin a un ciclo sin inaugurar nada, es pesimismo y crisis de sentido, también necesidad de un cambio más allá de lo que puede el superhéroe. La imagen absurda en que queda Iron Man luego de la guerra en Ucrania, es la imagen de las amenazas de las nuevas derechas que no se traducen en más que llamados a que otro, la policía o el ejército, ejerzan la violencia que desean. Ellos no son capaces, tampoco lo son policías y militares. Son tiempos de límites, también para la ultraderecha basada en el retorno a 1990. Batman, lo sabemos, no es de izquierdas, pero en la última película se declara el vacío político del fascismo, también el de la clase social de Bruce Wayne. Batman, como la mejor expresión de la juventud burguesa, ya no tiene más que ofrecer que el cuerpo. Un cuerpo que se nos recuerda débil y limitado. Sus enemigos, también minimalistas y realistas, dan cuenta de ese desborde: la situación de caos de Gotham no es su culpa, sino su ecosistema. No se acabará cuando ellos se acaben. Continuar leyendo

Zhao Yanjing: “La elección de China en la guerra entre Rusia y Ucrania”

por Zhao Yanjing (traducción al español de Felipe Ramírez)

Ahora algunas personas dicen que la mayoría de los países del mundo están apoyando a Ucrania, por lo que China debe asumir un bando para no quedar afuera. Este es el pensamiento de un peón, no de un ajedrecista. En el juego mundial, sólo hay potencias, no “países”. Las potencias son los jugadores y “la mayoría de los países” son los peones, cuyo destino es ser sacrificados por las necesidades de las potencias. Cuando China era un peón, fue eso lo que le sucedió, pero en la actual situación somos un jugador, de lo que no tenemos que avergonzarnos. Los peones no pueden escoger ni escapar cuando van a ser sacrificados. Esta es la verdad para Taiwán y también para Ucrania. Y de todos los ajedrecistas, sólo los EE.UU. pueden hacer el primer movimiento, y Rusia y China sólo pueden aceptar pasivamente su decisión. Ahora que Biden decidió mover un peón en Ucrania, Putin sólo puede seguir el guion estadounidense. Continuar leyendo

¿Es tiempo de hablar con Hamas?

por Jonathan Kuttab (Traducción de Felipe Ramírez)

Es suficientemente fácil demonizar a nuestros oponentes y asociarnos sólo con nuestros amigos y con aquellos que están de acuerdo con nosotros. Requiere gran coraje y paciencia abrirnos a aquellos con quienes no estamos de acuerdo, sean colonos judíos, extremistas de derecha o izquierda, sionistas radicales, fanáticos religiosos o cualquiera que tenga otra opinión. Sin embargo, eso es precisamente lo que debemos hacer. Entiendo que este reto pueda ser un puente demasiado lejano para algunos de ustedes. Después de todo, va contra la sabiduría convencional de la mayoría de las organizaciones y activistas. Puede ser también contra la ley. Pero, me gustaría escuchar de otros que no están de acuerdo conmigo. Al menos, tengamos una conversación sobre un tema que ha sido un tabú por demasiado tiempo. Continuar leyendo

Las luciérnagas de Colombia o sobre las luces de la resistencia

por Natalia López

Que Gustavo Petro, un exguerrillero del M19 –guerrilla con la cual el Estado colombiano firmó un acuerdo en 1990–, haya alcanzado la presidencia de la república convirtiéndose en el primer presidente de izquierda en la historia del país, y que Francia Márquez, una mujer, lideresa ambiental y afrodescendiente, haya ganado la vicepresidencia, nos habla no solo de los logros futuros de procesos de desarme, diálogo y paz, sino también de formas de emergencia de lo popular que aunque a primera vista parecen inusitadas, han venido fraguándose en décadas de lucha frente al olvido y la ceguera estatal. Continuar leyendo

En Colombia, la esperanza se llama Petro y Márquez

por Felipe Ramírez

Que la izquierda haya triunfado en la primera vuelta en un país desgarrado por la guerra, donde la insurgencia se suma al sangriento paramilitarismo de derecha, al narcotráfico, al crimen organizado, a la fuerte presencia estadounidense y a la brutal represión del Estado, demuestra que sí se puede vencer. Sin embargo, es claro que se requerirá aún más trabajo. Petro y Márquez ya se encuentran en ello, movilizando a quienes no votaron en esta primera vuelta y a quienes votaron por otras opciones y deseen un cambio en Colombia. Combatir la pobreza y el hambre, aumentar los impuestos a los más ricos, ampliar los planes sociales, avanzar en una transición energética, incorporar a 3 millones de personas al sistema de pensiones son algunas de sus propuestas. Continuar leyendo