A 10 años del 4 de agosto de 2011
por Joaquín Trincado
Pero también estaban las cartas sobre la mesa: el 2019 pasa porque pasa el 2011. La década de desafío al modelo neoliberal planteó los problemas y las soluciones, que no llegaron y, por no llegar, plantearon también frustración. El sistema era impermeable al descontento. Entonces, frente al descontento, protesta; frente a la protesta represión; y frente a ella protesta e indignación. Pero en 2019 fue contestada con bencina: el estado de excepción prolongó el descontento, porque la represión era justamente el detonante de la revuelta. Y el tiempo en lucha, en la calle, en la conversación de la barricada y la marcha permitió concretar, recuperar demandas, reunirlas y ponerlas todas en lienzos, rayados, fotos y videos que invitaron a todo el movimiento a que ahora sí: “con todo, sino pa qué”. Continuar leyendo