por Luis Thielemann H.
No es posible sostener un medio con la fórmula de “una oferta atractiva para la demanda”. Una verdad dura es que no se puede competir contra el duopolio en el mercado, porque ese mercado no existe. En la teoría, no es la venta de contenidos de donde sale el gran bolsón de dinero que sostiene a un medio, sino que el negocio está en conseguir avisaje. Eso puede ser real en pequeñas comunidades y en las mentes de la fanaticada neoliberal, pero si se habla de sostener grandes medios de alcance nacional, la venta del avisaje no es un mercado. No es posible imaginar que medios que se declaren explícitamente independientes del gran empresariado, consigan por el simple gesto de la “mano invisible” un avisaje similar al del dupolio. El mercado del avisaje millonario, realmente, no es sino la forma legal del compromiso político de las clases propietarias y la necesidad política de que existan medios de prensa afín a su discurso. Compromiso, reiteramos, que está en crisis. Es a estas alturas urgente desmontar la idea de que un “bien pensado” acceso al mercado del avisaje es lo que ha faltado como base para la existencia de medios “competitivos” en una sociedad democrática, y, en ella, para la lucha política de izquierdas. Buscar vencer en el mercado de los medios es una trampa mental, es jugar con dados cargados. Continuar leyendo →