La costosa imaginación de las estrategias sin historia. Algunas notas

por Luis Thielemann Hernández

Esa es la tragedia estratégica: la coalición de gobierno dejó de creer en –o de querer a– la fuerza social que la hizo posible en el Gobierno. ¿Dejó de creer en sus fines, en sus medios o en su subjetividad conformada en la lucha? La parte más grave del problema, en todos los casos, es que dicho alejamiento, dicha desconfianza, es cada vez más mutua. Y eso es el núcleo de oscuridad aterrorizante del problema; porque de ahí, de ese afán de participar, o de cambiar las cosas que movilizó a millones por más de una década y que ahora resultó derrotado en las urnas y luego parece ser frustrado por la izquierda, comen los fascistas del siglo XXI, come la antipolítica que viene a imponer un nuevo feudalismo político en el capitalismo tardío. El populismo de izquierdas, al trancarse en sus promesas y desmentirlas con sus acciones, al liquidar su propia historia de luchas en el tacticismo cortoplacista, aumenta el caudal de la antipolítica, de la violencia autoritaria del fascismo por venir. Así de costosa es la imaginación estratégica sin historia. Continuar leyendo

PALIMPSESTO: Muros del Estallido

por Nicolás Román

La exhibición se nos presenta por capas, los muros, las imágenes de los muros, la letra, la iconografía de la revuelta, la ruina y el registro proyectado sobre ellas en una atmósfera de la protesta como una naturaleza muerta. Palimpsesto es una reescritura, una insistencia por algo incomprensible que la revuelta desató. Un paso al acto generalizado que se transformó en acontecimiento y nos sacó las palabras de la boca para plasmarlas todas en los muros. Continuar leyendo

Teoría para no-aculturados, I

por Claudio Aguayo Bórquez

El gran ensayo deposita una enorme confianza en el estado y particularmente en el ensamblaje gobierno-pueblo para la tarea de “desmontar bloque a bloque el muro que nos cierra el camino”. Sólo un eclecticismo sin límites podía proponer este tipo de andamiaje entre pueblo, heterogeneidad, gradualidad y “desmonte” de la subjetividad neoliberal. Por eso las soluciones terminan siendo igualmente abstractas (“ir más allá de la mercancía y el valor de cambio”) o consignistas (desmontar el neoliberalismo “palmo a palmo”). El destino abstracto de las soluciones ofrecidas se refleja también en la mentada “lógica de lo común” que sería oposicional a la lógica o racionalidad neoliberal. Althusser también hablaba de los intersticios e islotes de comunismo en el capitalismo contemporáneo, pero los identificaba: un estadio de fútbol, una reunión, una fiesta. Precisamente porque la intensificación del capitalismo en la era de los datos ha hecho imposible una individualización transparente de dichos islotes –casi podría decirse, ocupándolos con el big data y la estructuración tecnocapitalista de los intercambios sociales– es que requerimos que el enunciado “lógica de lo común” se despliegue en algún sentido que no sea el de la consigna. De otra manera, sólo aparece como un guiño teórico hacia un lugar indeterminado –contrastando además con el reverso político de la apuesta de El gran ensayo: el estado como palanca de cambio del gradualismo anti-neoliberal. Continuar leyendo

La informalidad laboral: Algunas reflexiones desde la historia

por Ángela Vergara

El sector informal es [hoy] profundamente heterogéneo y abarca a profesionales autónomos que prestan servicios, trabajadoras y trabajadores del sector formal que realizan “pololos” ocasionales, jóvenes que no han podido ingresar al mercado laboral o personas mayores que no logran acceder a una pensión digna. El auge de la llamada economía “gig” y la subcontratación han contribuido a invisibilizar la relación laboral y crear nuevas categorías de trabajadores independientes que no tienen acceso a beneficios sociales y protecciones contractuales. Entender quiénes han sido las y los informales es fundamental para diseñar una política laboral que se centre en las personas y proteja y regularice todas las formas de trabajo, así como un sistema de seguridad social comprehensivo y solidario. Continuar leyendo

El largo plazo, el universalismo, y el sistema-mundo: reflexiones sobre un posible proyecto de izquierda

por Luis Garrido Soto

Si el largo plazo debe ser tomado seriamente en cuenta pues también lo global —el sistema-mundo, si se quiere— debe considerarse seriamente en un proyecto de izquierda. De nada sirve apelar al “internacionalismo proletario” si solo se limita a ser un eslogan sin contenido político concreto, o circunscribiéndose a acciones políticas particulares de corto plazo motivadas por algún asunto específico. ¿Por qué es tan importante? Pues, no solamente en el reconocimiento del mercado mundial como escenario concreto en el cual hay que tomar medidas protectoras lo cual conlleva, de hecho, una posición más bien pasiva por parte de los proyectos de izquierda en este ámbito que no es fructífera en el largo plazo. Continuar leyendo

Todos los nombres de Mahsa Amini, o sobre la crisis terminal del republicanismo islámico

por Afshin Irani

Aunque todo está dicho, nada está hecho. Es tarea de la sociedad iraní procesar este malestar para anteponerse a 49 años (y en perspectiva, a toda una historia moderna de la nación) de absolutismos camuflados. Sin embargo, el cambio en el sentido común de la sociedad, en el protagonismo de las mujeres cultivado en el seno de las luchas en contra de la contrarrevolución, es una fuente de esperanza inagotable. Es difícil, y raya en la ficción, pensar que estas protestas terminarán sin un cambio significativo en una sociedad vibrante y deseosa de una mejor vida. En esa travesía, el pueblo iraní merece toda nuestra solidaridad y apoyo. Zandeh Bad Mardome Iran. Continuar leyendo

El triunfante individualismo del Rechazo

por Tomás Cornejo Cuevas

La derrota de la izquierda no es nueva, y como en otros momentos históricos, ante las reacciones conservadoras solo se puede responder retomando la iniciativa, pero no en base a supuestos intelectuales ni en base a intereses particulares, sino en base a la realidad efectiva y pregonando el abandono (momentáneo) de intereses corporativos para abrazar intereses universales. El proceso constitucional sí logró avanzar un trecho, instaló tópicos no discutidos antes, pero no es un campo fértil en que sea posible insistir. La forma de hacer realidad aquellas luchas sociales de más de una década, será insistir en mejorar las condiciones materiales de existencia de las masas populares, pero no en base a cambios radicales de un sistema altamente interiorizado por el común de nuestros compatriotas, sino por un gatopardismo invertido: proponer mantenerlo todo para cambiarlo todo, pues una idea solo es verdad cuando se vive como tal. Continuar leyendo

El momento constituyente

por Rodrigo Muñoz B.

Partamos por olvidar que el estallido social fue un triunfo de nuestras ideas, al mismo tiempo que establezcamos como punto de partida que las izquierdas abandonemos la nueva Constitución para llenar el vacío de proyectos políticos que adolecemos. Debemos tener en cuenta que hay un cansancio muy grande de la manera en que se vienen haciendo las cosas, que es responsabilidad de los grandes actores políticos, sociales y económicos. Intuitivamente han olido eso quienes están negociando el segundo acuerdo constituyente, dejando fuera un nuevo plebiscito de entrada. Si bien las expectativas de cambio siguen estando vigentes, nada hace creer que este momento se mantenga inalterable en los siguientes meses y no se vuelva un malestar cada vez mayor, como pareciera que están leyendo el Partido Republicano como el PDG esta coyuntura. Continuar leyendo

Wenceslao Roces y Pablo Neruda: camaradas del exilio y la revolución

por Manuel Vega Zúñiga

Hoy, con la premoción de medio siglo de la que hablaba Wenceslao Roces cuando nos decía a las futuras generaciones que “la poesía es la voz del pueblo, y el pueblo es la voz y el brazo de la justicia”, hoy, en el año 2022, nos habla Pablo Neruda con inquietante actualidad para recordarnos que “sólo con una ardiente paciencia conquistaremos la espléndida ciudad que dará luz, justicia y dignidad a todos los seres humanos. Así la poesía no habrá cantado en vano”. Continuar leyendo

Calibrar la brújula

por Alondra Carrillo y Karina Nohales

El Rechazo, en última instancia, supo apuntalar su campaña en la defensa de la propiedad, de la familia y de la nación, que engloba un sentido general de lo que parecer ser todo lo que la gente tiene, cree tener o desea tener. Lo que se jugaba en la mentira de que el ahorro previsional sería expropiado no era un debate sobre el sistema de pensiones, sino un debate sobre la propiedad y la posibilidad de heredar a la familia el fruto del esfuerzo ahorrado. Lo que se jugaba en las mentiras sobre la vivienda que nunca sería propia era el deseo profundo de quienes no tienen casa propia de tenerla y de dejarla como el mayor legado a los hijos, a la familia en nombre de la cual se construye cada sacrificio diario. En un país con escasos sentidos de pertenencia a algo colectivo la nación porta un sentido de identidad, y en el caso de ciertas iglesias, especialmente las evangélicas, también lo hace la defensa de una cierta noción de la familia y del mandato patriarcal que le da forma. El 25 de octubre de 2019, miles que nunca habían marchado salieron a las calles sin más símbolos ni estandartes que la bandera chilena. Chile despertó, pero la plurinacionalidad fue mañosamente presentada como la disolución de aquella identidad. Continuar leyendo