Teoría para no aculturados III. Cuestión de paralajes.
por Claudio Aguayo
En ese sentido, debemos leer a Peña como uno de los autores límite de la derecha neoliberal. Al menos, su posición auténticamente capitalista, como intelectual orgánico de la burguesía liberal chilena, nos deja ver la narrativa fantasiosa, el sueño, lo que Freud llamaría el “sentimiento oceánico” del neoliberalismo: la ilusión de que estamos mejor que antes. Al mismo tiempo, ofrece una solución loable: el Leviatán hobbesiano. Precisamente por su conocimiento, aunque sea distorsionado, de la estructura libidinal de las revoluciones, de su encadenamiento deseante, Peña fue uno de los intelectuales que, en medio de la revuelta, exigió derechamente a Sebastián Piñera que reprimiera de forma ejemplar las manifestaciones. ¿Se nos olvida que el Leviatán comienza con una descripción minuciosa del deseo, la potencia y los afectos humanos? El estado capitalista se construye sobre ese fondo de malestar. Continuar leyendo